Ariel Wilner nació en Buenos Aires en 1960. Es Licenciado en Ciencias Biológicas por la UBA – Universidad de Buenos Aires (1985), MSc. en Genética por la HUJ (1987) y Dr. en Genética Molecular por UBA (1991). Desarrolló una carrera empresarial en la Industria Argentina por más de 25 años. En la actualidad, producto de su interés en el arte contemporáneo, crea y dirige un proyecto de carácter artístico, por el cuál produce imágenes digitales, destinadas a poner de manifiesto la compleja vinculación entre la visualidad del mundo circundante y su percepción por parte de la mente humana, desde una concepción que cruza los lenguajes artístico y científico. Con el objetivo de contener conceptualmente este proyecto, crea el Instituto Cordu, marco ideal desde donde interacciona con la comunidad, a través de plataformas en red. La visualización de cada una de las imágenes que se presentan en el Cordu, implica una experiencia intelectual.
Idioma original: Español
Fecha de Publicación: 15/02/2018
¿Podrías explicar cómo relacionas tus conocimientos científicos con el arte?
Pienso que la creatividad y la curiosidad están muy de la mano en artistas y científicos. La hipertrofia de la curiosidad me llevó a terminar un doctorado en ciencia. Diría de mí mismo que siempre me sentí muy creativo e imaginativo, aplicando esto a cada una de las actividades que fuí desarrollando a lo largo de mi vida. A partir de los conocimientos y visión que uno va adquiriendo a lo largo de la vida, es que me parece completamente natural que en mí se hayan juntado ciencia y arte. La aparición de los smartphones con las herramientas y apps asociadas se tornó en una oportunidad fantástica, y espontáneamente comencé a jugar con luces y fotos para interpretar conceptos científicos. Describo lo que veo desde mi lugar. Ese lugar es una sumatoria de las experiencias, conocimientos y habilidades con que me fui cruzando a lo largo de mi vida.
¿Tenés una definición de arte-ciencia?
Diría que para los humanos es muy importante clasificar y agrupar en categorías, clases, grupos, a todos los objetos y conceptos con los que nos vamos relacionando en nuestros mundos. La visión del arte corriente de nuestros días, el Arte Contemporáneo, nos libera de la necesidad de rotular y nos permite tender puentes entre los universos sin un cuestionamiento de categorización. Es decir que hay en el Arte Contemporáneo áreas de interacción en las cuales no hay reglas definidas ni límites predeterminados. La barrera de entrada en el arte – ciencia es el conocimiento ineludible en el capítulo del conocimiento al que referimos como ciencia. Sin embargo para el capítulo del arte alcanzaría con reconocerse como artista. En mi caso particular, el punto de partida es poner foco en un cierto concepto científico y proponer una visión artística para dicho concepto, acompañandola de una definición textual que describa el fenómeno referido.
¿Qué similitudes y diferencias encontrás en los procesos de investigación científica y los de investigación-creación artística?
El proceso de investigación científica tiene como principal desenlace la obtención de resultados y conclusiones que puedan ser validadas y repetidas por pares. En cambio, en el arte no hay definición para el desenlace. En el arte no hay desenlace. Podría tomarse como definición de éxito el hecho de que haya muchos “espectadores” y seguidores de un cierto artista, y hasta podríamos validar la popular definición de que un artista es exitoso si su hay un público dispuesto a pagar por acceder a poseer su obra. De manera tal que no creo que haya un paralelismo entre los procesos. Si, en cambio me animaría a decir que hay una coincidencia en las habilidades de un científico y un artista en relación a su proceso creativo, de imaginación y de prueba y error (aún mediante el método científico).
¿Pensás que existe o es posible desarrollar procesos de colaboración entre los mundos de la ciencia y los del arte? Y en tal caso: ¿de qué modo?
Entiendo que es obligación de los científicos quitar ese muro glamoroso que separa a la sociedad del conocimiento especializado. Durante muchos años, y aún hoy perdura en ciertos ámbitos de la comunidad científica una cierta reticencia hacia la divulgación y la conexión entre ciencia y vida cotidiana. Tanto más desarrollada es una sociedad, tanto menor es la distancia entre ciencia y sociedad. Esto se visualiza claramente en cuantas mejoras son capaces de darle los científicos a la sociedad en que viven , medido en términos de bienestar y mejoramiento de la calidad de vida. El desarrollo de patentes, la capacidad de recibir en los museos especializados a los niños para familiarizarse con la ciencia, y el desarrollo de emprendimientos tomando como punto de partida el conocimiento científico, son ejemplos de sociedades que interactúan democráticamente y devuelven a la sociedad la riqueza de la que se nutrieron para formarse. Lo mismo debe pasar en el mundo del arte. Jugar, interactuar, pasar de un universo a otro, son señales de conexión entre la comunidad científica y la comunidad en general. Lo mismo en ciencia y arte.
¿Podrías describir tu trabajo artístico reciente?
Mi trabajo artístico comenzó hace muy poco tiempo. Me inicié hace apenas dos años, a mis 55. Casi de casualidad. Tengo tres hijos jóvenes, muy metidos en el mundo digital, uno trabajando en Google, otro en Facebook y otro en su startup de criptomonedas. Solo para seguirlos a ellos y entender un poco mejor su realidad, es que abrí mi página de Instagram, para entender mejor y estar más próximo a ellos. Al mismo tiempo empecé a sacar fotos con mi celular y a procesarlas con diferentes aplicaciones en el propio celular, y a postearlas en mi instagram. La imágenes resultantes eran completamente abstractas. Empecé a entender mejor lo que se podía lograr, y así empecé a buscar la manera de desarrollar imágenes que fuesen compatibles o descriptivas de conceptos biológicos. A los 60 días, y con algo más de 100 imágenes, me invitaron a exponer a Londres, a una galería de arte vanguardista, The Brick Lane. Eso me hizo cobrar mucho entusiasmo y fuí desarrollando cada vez más y mejor la técnica de aproximación entre los conceptos que buscaba “documentar” y las imágenes que iba obteniendo. Siendo que todo transcurría dentro del celular, es que empecé a buscar la necesidad de salir del aparato y empecé a entrevistarme con gente del mundo artístico y de la producción. Allí conocí a Hernan Giagante quien rápidamente me propuso transformar este hobby en una obra de arte contemporáneo. Es así que fundamos el Cordu Institute, que es la entidad imaginaria que alberga mi trabajo. Desde el Cordu, empezamos a trabajar la conceptualización de la obra de arte contemporánea, y comenzamos a generar interacciones con aquellos actores del mundo Bio, con sensibilidad por el arte. Así fué como desarrollamos varias colaboraciones con científicos e instituciones. Con los científicos, las colaboraciones consisten en que nos ponemos de acuerdo en qué temática queremos trabajar, y a partir de allí nosotros proponemos las imágenes o los videos. Luego el científico propone un texto descriptivo, y ya, publicamos en simultáneo en la redes sociales.A partir de allí surgieron colaboraciones de distinto tipo. A modo de ejemplo, con la industria Farma, donde el calendario Gador 2018 está ilustrado con imágenes nuestras, con Akron Biotech, una compañía de Biotecnología de USA, o instituciones educativas como la Universidad Barceló, que nos ha propuesto la intervención de su nuevo edificio en el centro de la Ciudad de Buenos Aires.Cada día publicamos una imagen o un video con contenido artístico vinculado al mundo biológico.
¿Por qué lo hacés? ¿Cuál es la motivación y qué desearías lograr a través de este proceso de experimentación, investigación y creación?
Hago lo que hago básicamente porque soy un apasionado y me gusta hacerlo. Me motiva la admiración hacia la perfección de la Naturaleza, la pasión por entender sus mecanismos, y la belleza que veo allí. Encontré el modo, jugando con luces, a través del cual puedo darle una nueva dimensión a esos conceptos. Lo que más me gusta es cuestionar el concepto de imagen verdadera, ¿Qué imagen es verdadera? Los activos más importantes de un científico son la honestidad, y la verdad, mientras que para un artista su principal activo es la creatividad y lograr apasionar a terceros con lo artísticamente creado. Me gusta jugar con la originalidad, y con la sorpresa de nuestro público. Buscamos generar un puente muy ancho entre la ciencia y el arte. Buscamos interesar en nuestro proyecto a todos aquellos que quieran jugar e interrogarse acerca de la visualidad del mundo y su percepción por parte de la mente humana.
¿Cómo llegas a lo que hacés hoy?
Esto forma parte de un proceso de crecimiento personal e institucional permanente. Va tan rápido como el agua del río de Heráclito, en constante cambio y construcción, sin resistencia a las sugerencias del mundo artístico y científico. Pienso que somos una performance de arte contemporáneo en tiempo real. La interacción con los actores y oportunidades que se nos aparecen a diario, van marcando nuestra corriente. Todo el tiempo nos cruzamos con actores y oportunidades impensable. Nuestro cartel de Neón dice “Work in Progress” todo el tiempo.
Si pudieses disponer de los medios, el tiempo, las oportunidades… ¿Cuáles son los próximos pasos que desearías dar y/o proyectos a desarrollar?
Me gustaría mucho lograr ampliar nuestros puntos de contacto con el mundo científico a través de lograr más interacciones con investigadores. También nos interesa desarrollar un debate acerca de qué significa el arte contemporáneo tomando como punto de partida la interpretación por parte de la mente humana de imágenes asociadas a conceptos. Para la mente humana, el ADN es sólo visible mediante interpretaciones indirectas logradas a través de complejos métodos de detección. Así como en el arte ortodoxo, un cuadro de una naturaleza muerta, es una interpretación de lo que se vé desde los ojos del artista, nosotros tratamos de interpretar artísticamente hechos de la biología, e invitamos a los actores que tienen contacto con el mundo Bio a que nos compartan su interpretación y percepción, en lo que sería para nosotros una performance en tiempo real. Buscamos entender el significado de la imagen artística para la mente humana, y la imagen científica para el investigador. Jugamos con eso. Nos gustaría publicar una serie de entrevistas cortas con personajes reconocidos del mundo artístico y el científico en general, y compartir sus visiones del arte contemporáneo desde nuestras plataformas en red.Nos encantaría profundizar nuestros vínculos con Instituciones de Investigación, con investigadores, con la industria Farma, con instituciones educativas, y con todas las comunidades vinculadas. Estamos ideando una aplicación para celulares que permita interacción entre los diferentes actores de cada una de estas comunidades, pero cada grupo en su propio cluster : Un salón para funcionarios de compañías Bio, otro para estudiantes de medicina, otro para pacientes que tomen una cierta medicación, y en cada caso potenciar este juego de interacción entre concepto, percepción e imagen, como para poner algún ejemplo. Nos gustaría generar una galería de imágenes sobre la alegría (alegría y galería se componen de las mismas letras!) jugando con la percepción de estos conceptos en la comunidad de pacientes que tengan dificultades para disfrutar de dicha alegría. Creemos que en este juego, los podríamos ayudar a encontrarla. Lo mismo con pacientes autistas, o con investigadores sobre la biología molecular del cancer. Nuestra máxima aspiración hoy, sería lograr nuestra presencia en Art Basel, con el apoyo de las comunidades con las que interactuamos, para lograr democratizar cada vez más el puente entre arte y ciencia.
Links de referencia:
Instagram del Cordu Institute